“Reflexiones de un
payaso tras más de once años recorriendo el mundo en bici”. Este
es el resumen que hace Álvaro Neil, conocido como biciclown, en la
portada de su libro. Si esa reseña no te ha enganchado, no sigas
leyendo, no te va a interesar el libro y vas a perder un precioso
tiempo de tu vida. De eso precisamente habla Álvaro en su libro.
Desde que hice mi viaje
mochilero me han atraído cada vez más, casi como una obsesión, cualquier
historia de viajes largos. No hay más que ver la lista de mis
lecturas. Me da igual que sean mochileros o no, nómadas a pie, en
coche, en moto, a caravana o en bicicleta, como Álvaro, que un buen
día, allá en el 2004, empezó a pedalear y lleva así diez años
viviendo de un lado a otro y ganándose la vida como clown, es decir,
payaso, por eso se hace llamar “biciclown”.
Ha escrito varios libros
y realizado varios documentales, pero este último relato no
viene a contarnos sus aventuras en algún país de Asia, ni alguna
anécdota de su periplo en la bicicleta o si ha pinchado y se ha
quedado tirado en el fin del mundo. Su décimo aniversario como
nómada ha querido hacer una pausa, un reposo de su larga vida encima
de la bicicleta, y nos deja unas reflexiones de la vida. Sin ser
pretencioso ni dar lecciones a nadie, nos cuenta, con la experiencia
de una persona que ha dormido en multitud de ocasiones mirando a las
estrellas, las conclusiones a las que ha llegado a estas alturas de
viaje, o de vida, porque su vida es un viaje.
Podría decir que no es
un relato de viajes, pero sí lo es, es un viaje al interior del ser
humano, un viaje a las entrañas del por qué y, con las experiencias
de sus más de diez años de aquí para allá, nos trae este regalo
resumido en unas páginas, por cierto, muy bien editadas. Sus
seguidores le han querido ayudar y, entre unos y otros, han hecho un
libro especial, como la historia que nos cuenta “biciclown”.
Yo pude comprar el libro
junto a unos imanes cuando hizo el crowdfunding. Ahora puedes
adquirirlo en su web por 15,60 euros.